Cooperativa Agraria Chirinos
La Prosperidad de Chirinos es una cooperativa de productores de cafés de altura que ofrece un café orgánico de calidad, aprovechando las condiciones naturales especiales de la zona y la experiencia de su historia cooperativa.
HISTORIA
Financiando los ciclos del café: Cooperativa La Prosperidad de Chirinos
Jaén, Perú. La Cooperativa La Prosperidad de Chirinos es una entidad de segundo nivel que engloba a 814 socios y socias, productoras de café “de altura”, en todos los sentidos. Al norte del país, casi en la frontera con Ecuador y con una climatología propicia al cultivo de cafés de muy buena calidad, la cooperativa trabaja desde hace 55 años en la exportación del café, de comercio justo y ecológico.
Michael Montalvan y Einstein Cordova nos atienden desde su despacho para explicarnos la relación de su organización con las finanzas éticas. Michael es el gerente y Einstein lleva la administración. La cooperativa, como empresa que mueve una cantidad importante de fondos anuales, es usuaria de las finanzas éticas y, en concreto, de Oikocredit, la entidad que proporciona crédito y capital social a cooperativas productivas, organizaciones de comercio justo y pequeñas y medianas empresas con impacto social.
Finanzas éticas como aliadas
Michael explica que el café cultivado por los y las socias de la cooperativa es de muy buena calidad, mayoritariamente orgánico, y que se vende a más de diez países, entre Estados Unidos y Europa, principalmente. La facturación anual ronda los doce millones de dólares, cifra de demasiada magnitud para no necesitar aliados financieros, y que requiere regularmente de líneas de crédito para poder mantener los pagos a los agricultores en su debido tiempo. “Por ello, desde nuestros inicios hemos estado trabajando con financiadoras, algunas locales, otras extranjeras, y entre ellas se encuentra Oikocredit”, explica Einstein. Se conocieron en una feria de café, donde la entidad de microfinanzas éticas ofrecía la posibilidad de tomar líneas de crédito a organizaciones con visión y consciencia ambiental, como es el caso de Chirinos. Unos meses después comenzaron las conversaciones, que se concretaron en la concesión de un primer crédito, que se ha ido renovando año tras año.
Oikocredit es, en boca del gerente, un verdadero aliado, una entidad con la que les gusta mucho trabajar porque es muy cercana; de hecho, Carlos Teran, su referente en la zona y la persona que se presentó en la feria, siempre ha sido una persona de confianza para la cooperativa. “Las conversaciones para seguir con los créditos de manera anual son fáciles, aunque también es de justicia decir que somos muy cumplidores nosotros, también, por lo que respecta a la entrega de la documentación con los requerimientos que nos piden”, explica Michael. Así, después de la recolección y durante los meses en los que el café se deposita en la cooperativa, se almacena y se embarca hacia las empresas compradoras, se puede pagar el trabajo realizado a los y las productoras, mientras se espera el pago. La línea de crédito, que es de un millón de dólares, cubre ese periodo de tiempo, que suele ir de junio a octubre. De esta manera, Oikocredit adelanta el importe de la venta que luego recibirá íntegramente de las empresas compradoras y cuya diferencia, después de haber descontado el crédito y los intereses, enviará a Chirinos.
El café como punto de encuentro entre inversores y productores
Con la concesión de esta financiación puente, pequeños inversores, socios de Oikocredit, mayoritariamente europeos, pueden participar en el buen funcionamiento de organizaciones como Chirinos, y contribuir a una consolidación o crecimiento sostenible de iniciativas que tienen como objetivo mejorar la calidad de vida de sus miembros. Según Einstein, este es precisamente el objetivo que tiene la cooperativa, “poder generar oportunidades de desarrollo sostenible para nuestras familias agricultoras. Las personas beneficiarias finales pueden llegar a ser más de 1600, y esta cifra es muy importante para nosotros”.
Siguiendo con las ventajas de tener como aliado a las finanzas éticas, Michael nos dice que “la elección fue acertada porque, además de los créditos, cuyas condiciones financieras son similares al resto de las financiadoras, estamos aprovechando una serie de capacitaciones hacia nuestro equipo humano, que recibimos de Oikocredit; en el manejo de riesgos y modelo de negocio, por ejemplo, son muy expertos y nos ha ido muy bien”.
Compartiendo responsabilidad medioambiental
Además de los valores del cooperativismo y del comercio justo asociado a los salarios dignos y proyectos sociales que se impulsan desde la organización de Chirinos, otro de los elementos que han acercado la cooperativa a las finanzas éticas, y a Oikocredit en particular, es el eje de desarrollo de una producción agroecológica que logre contribuir a la resiliencia al cambio climático. En efecto, “esta responsabilidad medioambiental es compartida por ambas organizaciones. Para ello tenemos el sello de agricultura orgánica regenerativa (el estándar Regenerative Organic Certified), entre otras herramientas”, comenta Michael.
Esta preocupación compartida es, además, una apuesta de posicionamiento en el mercado internacional, en estos días muy volcado en los cafés de “especialidad”, una cosa que, en el caso de Chirinos y de la mayoría de cafetaleras, es ya una visión de futuro. Nos comentan Michael y Einstein que ahora mismo el negocio del café es de mucha complejidad e incertidumbre. “La volatilidad del mercado y la adaptación al cambio climático son los principales retos a los que nos enfrentamos, y por ello comentábamos anteriormente que la profesionalización en manejo de riesgos es crucial para reforzarnos y ser más resilientes”, explican.
En un futuro, la relación entre las dos organizaciones pasará por ampliar la alianza a créditos de inversión a medio plazo. Por un lado, la entidad financiera ya ha comunicado la disponibilidad de este tipo de fondos, y, por otro, la cooperativa está convencida de que la capitalización es muy importante para mantener las rentabilidades futuras. Aun así, de momento seguirán con las líneas de crédito, consolidando negocio para poder lanzarse a una aventura mayor. Este afianzamiento pasa ahora mismo por un contrato que han conseguido con uno de los clientes, a precio fijo durante 5 años y para la financiación del cual Oikocredit será el principal aliado financiero.